
ARGUMENTO
Susana se despierta de nuevo de la misma pesadilla, y ahí está su hermana como todos los días, tratando de animarla para que se olvide de ella. Violeta la lleva al cuarto de juegos, de repente la empieza a mojar con una pistola de agua. Entre risas, las dos juegan a carcajadas y se escucha la voz de Beatriz, la niñera, quien desde la cocina las llama a desayunar. Las niñas tratan de limpiar un poco el desastre que acaban de formar al recordar que sus padres llegaron el día anterior de viaje, se emocionan mucho y corren juntas hacia el primer piso. Su madre: Claudia está hablando por teléfono y las saluda con un fuerte abrazo, las niñas impacientes por hacer planes con su mamá le hablan mientras ella está ocupada pero Claudia no les puede prestar atención por lo que les señala el montón de cajas con juguetes nuevos en la sala. Las niñas decepcionadas van a abrir sus regalos como de constumbre. En ese momento su madre le grita a su asistente y cuelga el teléfono. Llega el padre de las niñas, Gustavo, a regañarla y a discutir con ella sin percatarse de que las niñas están ahí viéndolos, al verlas les pide un beso, pero llega Beatriz diciéndole al señor que el carro lo espera para llevarlo al aeropuerto. Las niñas se decepcionan con mucha tristeza y rabia. Los padres tratan de darles las mismas explicaciones pero para Susana y su hermana estas explicaciones son las mismas de siempre y salen corriendo para la habitación de juegos muy decepcionadas y enojadas. Pasan las horas y las niñas están aburridas y tristes, Violeta queriendo controlar la situación invita a su hermana a jugar, pero en ese instante llega Beatriz a regañarlas pues todavía persiste el desorden. Cuando abandona la habitación Violeta se pone una máscara de bruja y empieza a imitar a su niñera, desde ese momento las niñas empiezan a jugar y al hacerlo, se transforman a un sitio mágico lleno de color y muy diferente a la realidad, Violeta es una guerrera y Susana es una princesa, allí las dos pueden jugar a ser todo lo que no pueden en la vida real.
Cuando terminan su juego y anochece las niñas tienen mucha hambre y bajan a ver qué hay de comida pero está Beatriz con su novio, quien al verlas las regaña muy fuerte haciendo que las niñas la amenacen con contarle todo lo que ella hace a sus padres, Beatriz responde a esto encerrandolas en cuartos separados.
Susana después de sentir que la peor tortura fue estar separada de su hermana por más de 24 horas, logra escapar y ver a su hermana quien está muy golpeada por la niñera. En ese momento un ataque de pánico y paranoia invade a Susana y termina convenciéndo a Violeta a huir del condominio, pero es ahí cuando empiezan a correr por el conjunto que Susana resbala en la piscina del salón social y cae en ella recordando que no sabe nadar. Grita a Violeta por ayuda, quien solo se queda ahí parada viéndola.
A la mañana siguiente encuentran a Susana ahogada en la piscina y a una muñeca en la orilla, con las mismas características de Violeta, la supuesta hermana de Susana, quien en realidad se trataba de una muñeca.